Tormenta albiazul

Noche de tormenta ayer en Vigo y con varios sentidos. La ciudad gallega tuvo una noche desapacible debido a las fuertes lluvias caídas y además, por la estrepitosa derrota de su equipo ante un Recreativo que pasó como un huracán. Colosal partido de los albiazules en una demostración de poder no vista desde tiempos de Marcelino y de eso, ha llovido mucho.

El Celta llevaba cuatro partidos sin ganar, en los cuales solo había conseguido un punto. Lo de ayer era más que una final para ellos, hasta tal punto que hicieron campaña desde el club para llenar Balaídos. Pero, la incesante lluvia echó para atrás a muchos fieles que quisieron seguir el partido desde su casa a través de Marca TV. Mención especial para esta televisión y el seguimiento que hace del fútbol modesto, de chapó.

Delante estaba un Recre que venía con una dinámica muy positiva y al que se consideraba un "matagigantes" debido a los buenos resultados cosechados ante equipos de la parte alta de la tabla. Como muestra, su victoria en el Villamarín, el 4-0 ante un enrachado Girona o la casi victoria ante el Rayo de la jornada anterior.

Paco Herrera hizo varios cambios en su once debido a las lesiones y alguna sanción. Otra semana más no pudo contar con el mariscal Jonathan Vila ni con Hugo Mallo en el lateral derecho. Esto, unido a la baja de Murillo, propició que el centrocampista Bustos ocupara la banda derecha. En el centro del campo, el felizmente recuperado Oubiña volvió a ser titular. Por parte recreativista, la baja por sanción de Matamala fue suplida por Emilio Sánchez. Además, Ríos decidió sentar a Mora para dar entrada de inicio al uruguayo Andrés Lamas.

El partido en sí fue un monólogo recreativista desde el primer minuto. Con una presión asfixiante, el Recre se hizo dueño de la situación acosando a un Celta gris que no sabía que hacer. Pablo Sánchez y Asen, avisaron a los gallegos antes de que se produjera una acción crucial para el desarrollo del partido, la expulsión de Falcón. El meta celeste pegó un codazo a Juan Villar que el asistente de Ontanaya López vio y le mandó a la ducha antes de tiempo. Justa expulsión como también es justo reconocer el mal comportamiento de Juan Villar tras la agresión dando repetidas vueltas sobre el cesped. Actuación digna de Oscar (o Goya, como ustedes quieran).

Tras la expulsión en el minuto 37, el Celta, que estaba siendo inferior con 11, definitivamente desapareció. Además, justo antes del descanso recibió el mazazo del gol tras un buen tanto de Emilio Sánchez previa asistencia de Pablo Sánchez. Gol que hacía justicia a lo visto en la lluviosa Vigo en los primeros 45 minutos.

La segunda parte fue más de lo mismo. El Recreativo, controló la situación intentando golpear en alguna llegada y el Celta apenas inquietó a Fabricio salvo en un remate de David Rodríguez. En el 64', Pablo Sánchez se encargó de finiquitar el partido en una jugada personal en la que se regateó hasta al portero celta Yoel. Un gol de esos que saldrían en todos los telediarios si lo metiera Messi Con el 0-2, el Recre tuvo varias llegadas más para ampliar la cuenta, pero no fue hasta el 91 cuando Juan Villar hizo el 0-3. Nuevo partidazo del canterano albiazul quien se ha convertido en indiscutible para Carlos Ríos.

En definitiva, el Recre pasó como si una tormenta se tratara sobre tierras gallegas y deja al Celta tocado y hundido. Aún quedan jornadas, pero la mala racha y sobre todo, el bajón futbolístico de los celestes no invitan al optimismo. Todo lo contrario que el Decano, que deja atrás el fantasma del descenso y mira tranquilo hacia arriba. El playoff está a 7 puntos, en una Liga Adelante tan loca como la de este año, no se puede dar nada por imposible.

Ficha del partido

Celta: Falcón 1; Bustos 3, Ortega 3, Catalá 4, Roberto Lago 3; López Garai 3, Oubiña 3 (Dani Abalo 4) Alex López 4; De Lucas 3 (Papadopoulos 3), Trashorras 3 (Yoel Rodríguez 6); David Rodríguez 3

Recreativo: Fabricio 6; Rafita 7, Andrés Lamas 8, Manolo Martínez 7 (Mora 6), Raúl Cámara 6; Juan Villar 9, Emilio Sánchez 8, Jesús Vázquez 8, Aarón 7 (Aitor 6); Pablo Sánchez 9 (Dani 5), Asen 7

Goles: 0-1. m.44. Emilio Sánchez; 0-2. m.63. Pablo Sánchez; 0-3. m.90. Juan Villar.

"Cuanto menos gasto, mejor!!"

Tras años y años gastándose un pastizal en mediocentros que hicieran olvidar al añorado Poulsen, el Renato de antes, Seydou Keita y a Pep Lluis Martí, el Sevilla F.C. ha encontrado la solución invirtiendo solo 5 millones de euros en este mercado invernal, una escasa cuantía si repasamos el historial de fichajes en las últimas temporadas.

El club hispalense ha tenido graves problemas en la zona central del campo en los últimos años. Con la salida en 2008 de Poulsen, Keita y Martí, Del Nido tuvo que rascarse el bolsillo y reforzar esa zona con el cumplidor Duscher (2,5 millones) y Ndri Romaric, por el que pagaron al Le Mans 9 milllones de euros. Ni uno ni otro funcionaron en la campaña 08/09, 11 millones de inversión que no resultaron.

En la 09/10, Monchi reforzó otra vez la posición central (mermada por la salida de Maresca) con el fichaje del marfileño del Tottenham Didier Zokora por 9 millones de euros y la vuelta del canterano onubense Lolo, quien venía de haber hecho un gran año en el Málaga. Zokora hizo una temporada de más a menos, mientras que Lolo apenas jugó. Eso unido a la edad de Renato, un Romaric demasiado irregular y un Duscher que aportaba poco, hicieron que el Sevilla en el medio no tuviera esa consistencia que se buscaba. Por ese motivo se volvió a mirar el mercado de mediocentros en verano de 2010 y con las bajas de Lolo y Duscher se trajo a dos italianos, Guarente (5.5 millones) y Cigarini. Una vez avanzada la temporada, estos dos jugadores no fueron las soluciones esperadas. Guarente se lesionó gravemente la rodilla y Cigarini apenas ha dispuesto de minutos.

El estado de los italianos hizo a Monchi buscar una solución en esta parcela del campo en el mercado invernal y parece que volvió a usar esa pócima mágica que resultó para fichar a Adriano, Dani Alves, Poulsen, Keita o Baptista. Invirtiendo menos que lo pagado por Guarente, se trajo a dos jugadores jóvenes y con potencial. Por apenas 2 millones se hizo con los servicios del joven croata de 22 años Ivan Rakitic, procedente del Schalke 04. El croata no quiso renovar con el equipo alemán y pese a que sonó con fuerza como refuerzo del Atlético de Madrid, terminó sorpresivamente en Sevilla. El otro jugador contratado en el mercado invernal fue el internacional chileno Gary Medel, por el que pagaron 3 millones de euros por la mitad de su pase. Un jugador que según su ex-compañero en Boca Juniors, Juan Román Riquelme "era el alma del equipo".

Nada más llegar, Rakitic y Medel tuvieron la confianza de Manzano y no dudó en alinearlos juntos. Con el paso de las jornadas, la calidad, golpeo de balón y llegada al area rival de Rakitic y el trabajo inmenso de Medel en la recuperación, han hecho al Sevilla tener por fin una pareja de mediocentros que se complementen tras 3 temporadas buscando. Solo 5 millones de euros han solucionado el problema, así que está claro que Monchi lo hace mejor cuanto menos gasta. Así que no estaría mal que el director deportivo sevillista se tatuara esta frase: "cuanto menos gasto, mejor".

¿Qué te pasa Ricky?

Ricard Rubio Vives, nacido en El Masnou (Barcelona) y más conocido como Ricky Rubio, está atravechando un bache en su carrera deportiva difícil de explicar. Este niño prodigio, capaz de debutar en ACB a los 14 años y que maravilló a todo el mundo, no es el mismo desde que decidió dejar el Joventut, inscribirse en el Draft de la NBA, ser elegido en el puesto 5 por Minnesota y no emprender la aventura norteamericana para firmar un gran contrato con el F.C.Barcelona. Solo hay que mirar las estadísticas, algo que mide la importancia de un jugador een este deporte.

En 2008-2009 promedió con el DKV Joventut, 10 puntos por partido, 6 asistencias, 2.6 rebotes y 2.2 robos por encuentro en 22 minutos; la temporada pasada en el F.C.Barcelona, promedió 6.6 puntos, 4.4 asistencias, 3.7 rebotes y 1.9 robos en 20 minutos, ayudando al equipo liderado por Juan Carlos Navarro a ganar Euroliga y Copa. Esta temporada, ha bajado sus números en anotación promediando tan solo 5 pts, aunque en los otros apartados está en sus números habituales.

¿Por qué ese bajón de 5 pts de promedio en tan solo dos temporadas? La respuesta es sencilla, y es que Ricky apenas tira a canasta. Este año promedia un 33% en lanzamientos de 2 pts, 50% en triples y 50% en tiros libres por partido, tirando una media de 3, 2 y 2 tiros respectivamente. Es decir, Ricky solo mira el aro (excluyendo los tiros libres) 5 veces por partido cuando en la Penya lo miraba el doble.

El motivo de tener tan pocos lanzamientos no sabemos si es debido a las directrices técnicas de Xavi Pascual, quien pide a Ricky dirigir y dejar los lanzamientos a otros compañeros, o a que el mismo Ricky ha perdido toda la confianza en su tiro y prefiere que sean otros los que ejecuten. Si es lo primero, desde el club culé están haciendo un flaco favor a un chaval cuya progresión no tenía techo y que necesita no estar encorsetado en un sistema prefijado para dar lo mejor de si. Si es lo segundo, está a tiempo de solucionarlo, todo depende de él, es una cuestión mental.

Lo que si es cierto es que un jugador de la importancia de Ricky no puede anotar solo 5 puntos por partido. Dando asistencias, defendiendo, dirigiendo a tu equipo y robando balones, se puede hacer carrera en esto, pero si no anotas, no das ese paso que te hace estar entre los grandes. Porque no nos engañemos, en Europa se puede ser grande, ganar títulos, pero esto es algo menor si lo comparamos con lo que hay cruzando el Atlántico. Leí hace poco que los Timberwolves estaban perdiendo la paciencia con Ricky y tal vez intentaran traspasar sus derechos a otra franquicia. Normal, uno ve las últimas actuaciones de Ricky y es que no está para dar el paso. Aquí sus números de todos los partidos de Liga de este año, hablan por si solos. Hace dos años nadie tenía dudas de que acabaría en la NBA, ni los propios medios americanos. Ahora, todo el mundo duda.

Todos los jugones sonríen igual decía el gran gran Andrés Montes. En los últimos tiempos no estamos viendo la sonrisa de este jugón del que esperabamos muchísimo más. Esperemos que recupere la sonrisa por el bien de nuestro baloncesto.

Champions: A cuartos sin despeinarse

Han tenido que pasar 6 temporadas, dolorosas derrotas ante el Liverpool, Roma, Arsenal, Juventus y Lyon, varios presidentes, tropecientos jugadores, para que el Real Madrid vuelva al sitio que le corresponde, estar entre los 8 mejores de Europa. Hoy derrotó a una de sus bestias negras sin hacer nada de otro mundo y con contundecia, como así refleja el 3-0 final.

El Madrid tenía encarrilado el pase tras conseguir un empate (que supo a poco) en la ida, pero los fantasmas de las seis anteriores temporadas estaban presentes en la mente de un aficionado madridista que no se fiaba nada del verdugo de la temporada anterior, el Olympique de Lyon. Los de Claud Puel recuperaron respecto a la ida, a uno de sus mejores jugadores, el argentino Lisandro López que salió de inicio dejando en el banquillo al goleador en el partido de ida, Gomis.

Mourinho tenía como principal duda a Cristiano Ronaldo y hasta pocos minutos antes de que echara el balón a rodar no se despejó la incógnita. Como no podía ser de otra manera, el astro portugués no se perdió la cita. Pese a ello, hoy en el Bernabeu se vió a un CR7 mermado y que pasó de puntillas por el partido.

El presidente del Lyon, Aulas, dijo que el Madrid iba a salir a defender el 0-0, pero se le olvidó comentar cual era la disposición que iba a tomar su equipo. Ni atacar ni defender fue lo que hizo el Lyon en los primeros minutos y el Madrid, sin hacer nada, pudo marcar en el 3' si no llega a sacar Lloris una buena mano a tiro de Marcelo. El portero galo fue el mejor de su equipo sin duda con algunas paradas espectaculares durante la noche. En la otra portería, Casillas mientras tanto, solo tuvo que hacer de santo en un disparo ajustado de Chelo Delgado que para colmo, iba fuera. Eso fue lo único en ataque destacable que hizo un Lyon empeñado en entrar por la banda derecha del Madrid con Cissokho (el lateral izquierdo) como principal estilete.

Viendo la flojedad atacante del rival, el Madrid se limitó a esperar y dar el zarpazo, algo que ocurrió en el 37'. Fallo en la construcción de la jugada de los galos, jugada individual de Marcelo que sortea a dos rivales con dos regates (espectacular el segundo de ellos) y bate a Lloris. Tuvo el Madrid el 2-0 poco después en otra internada de Marcelo que remató Benzema y que se encontró con el meta del Lyon. También le fue anulado un gol a Benzema antes del descanso (bien anulado).

Tras la reanudación, Puel sustituyó a un desaparecido Briand por Gomis, pero ni por esas su equipo reaccionó. El Madrid siguió controlando los frágiles ataques franceses y solo lo corto del resultado daba emoción al partido. Dicha emoción duró hasta el minuto 65, cuando un error tremendo de Cris y Lovren, dejó solo a Benzema ante Lloris y el delantero blanco, no perdonó. Segundo gol en la eliminatoria ante su ex-equipo y séptimo en cuatro encuentros para el criticado Karim. 10 minutos después, en nuevo error de la zaga francesa, Di María hizo el 3-0. El único lunar de la victoria blanca fue el ímpetu exagerado de Pepe, que un día puede acarrear una desgracia a un compañero de profesión...

El Madrid tras seis años espera rival en el sorteo del viernes y si la diosa fortuna es caprichosa y morbosa, podría emparejarlo con el Barcelona o el Schalke de Raúl. La vuelta del "7" a su casa o un duelo ante el eterno rival que si tocara el Barça, provocaría que hubiera cuatro clásicos en apenas tres semanas (contando la final de Copa y el partido de Liga). Impacientes estamos.

Alineaciones

Real Madrid: Casillas 5; Ramos 6, Pepe 6, Carvalho 7, Marcelo 9; Xabi Alonso 7, Khedira 6, Di María 6 (Granero 5), Özil 7, Cristiano 6 (Adebayor 5), Benzema 7 (Lass 5)

Olympique Lyon: Lloris 8; Reveillere 5, Cris 3, Lovren 3, Cissokho 4; Toulalan 5, Kallstrom 3 (Pjanic 5), Gourcuff 3 (Pied 4), Briand 3 (Gomis 5), Delgado 4, Lisandro 4

Goles: 1-0 Marcelo (37'); 2-0 Benzema (65'); 3-0 Di María (76')