El Clásico: primer round

Primer round de El Clásico y empate técnico. A pesar de que la trascendencia del partido era menor que en futuros envites por la ventaja blaugrana en Liga, se pueden hacer un balance de lo que puede deparar el futuro en uno y otro bando.

En el tema táctico, Mourinho aprendió la lección del Camp Nou e hizo lo lógico, plantear un partido feo, incómodo para el rival y con la misión de aprovechar fallos blaugranas para salir al contraataque. Leo que mucha gente cuestiona este planteamiento y más jugando en el Bernabeu, pero siendo realista es lo único que puede hacer el técnico portugués con lo que tiene en la plantilla para intentar plantar cara al Barcelona. Si uno analiza al Madrid encuentra que tiene solidez defensiva y jugadores arriba muy verticales que se encuentran cómodos cuando tienen espacio para correr. Si a esto añadimos que en el centro del campo no tiene jugadores para elaborar un juego fluido y que el Barça castiga las pérdidas en esa zona del campo, lo normal es lo de ayer.

Trascendental en ese entramado defensivo fue la posición de Pepe. El portugués y su despliegue físico, fue un tormento para los centrocampistas blaugranas y en especial para Messi. El argentino acostumbra a recibir entre líneas y salvo en un par de acciones, siempre se encontró bien marcado. Pese a jugar al borde del reglamento, el reconvertido central blanco cuajó una gran actuación e incluso se echó el equipo a la espalda en varios lances. Es de suponer que Mourinho seguirá usando a Pepe en esa posición en los próximos partidos ante los blaugranas pese a la baja de Albiol.

El aparato blanco para contrarrestar a los blaugrana funcionó ayer hasta la expulsión de Albiol, porque lo de después fueron los típicos arreones épicos que con frecuencia se visualizan en el Bernabeu. El motor del arreón fue un genio alemán que salió cuando el equipo estaba con 1o. Mourinho lo dejó en el banco sabiendo dos cosas: Özil no iba a ver el balón en la primera mitad y el Barcelona baja su nivel en las segundas partes. Por ese motivo el alemán cambió el partido. Salió fresco, con el rival cansado y su calidad hace que el jugar con uno menos no sea tan llamativo. El Madrid tiene por fin un balón de oro en potencia que si lo acompaña de los jugadores adecuados puede marcar una época. También fue importante la entrada de Adebayor, cuyo juego aereo puso en dificultades al Barça y sobre todo, permitió al Madrid ser más directo y disponer de segundas jugadas que Khedira, Özil o Cristiano aprovecharon. El togolés es un delantero más referencia que Benzema y es muy probable que sea titular en la final de Copa debido a sus características.

Del Barcelona también se pueden sacar varias conclusiones. La primera es que gran parte de lo que suceda en los próximos partidos dependerá del acierto de Leo Messi. Si está acertado, lo normal es que el Barça gane todo, si no lo está, el Madrid tendrá grandes posibilidades de pasar. Por mucho Xavi, Iniesta o Busquets, el ejecutor del juego blaugrana es el argentino, bien sea con sus goles o con sus típicas arrancadas en las que limpia defensas. Ya lo dijo Guardiola a unos aficionados maños tras una memorable actuación del argentino en La Romareda: "si no fuera por este, estaría entrenando en tercera". Sin el argentino el Barcelona sería un fiel reflejo de la Selección, mucha posesión, mucho dominio pero poca pegada y claro, lo del Mundial es difícil que se repita en todos los partidos porque el balón de Robben o el penalty de Cardozo suelen entrar.

A parte del decisivo factor Messi, otro aspecto a destacar es la excesiva dependencia de buscar la espalda de los defensas del juego blaugrana. Ayer, casi todas las jugadas de peligro del Barça fueron pases a la espalda de Albiol o Carvalho para Villa, en donde el asturiano provocó un penalty y otro que no pitó el árbitro. El fútbol del Barça se basa en marear y marear hasta ver el hueco y mandarle el balón a Messi, Pedro, Villa o Alves, que son los que suelen realizar ese tipo de desmarques. Demasiada dependencia de esa jugada que si el rival la lee bien, se puede contrarrestar.

El próximo round, la final de Copa, que tiene toda la pinta de ser un partido mucho más cerrado que el de ayer y que se decidirá por pequeños detalles. Veremos las alineaciones de Pep y Mou, pero creo que Mascherano, Adebayor, Arbeloa y Özil, serán titulares en la final de Copa.