Ayer tuvo lugar la última jornada de la Bundesliga y la Premier League. En Alemania fue el Bayern el vencedor aunque su partido era un mero tramite ya que debia perder por una cantidad desmesurada de goles ante el Herta, colista de la liga. El trámite se solventó con una cómoda victoria por 1-3. La evolución del Bayern este año ha sido muy positiva ya que una vez conquistado el título de liga, el próximo sábado disputará la final de la Copa de Alemania ante el Werder Bremen y a la semana siguiente la final de la Champions frente al Inter. Y digo evolución porque Van Gaal estuvo muy cuestionado en los primeros compases de la termorada y ahora puede lograr el triplete. La alegría y el buen ambiente reina ahora en Munich y prueba de ello es la celebración del título donde los jugadores persiguieron por todo el terreno de juego a Van Gaal lanzándole litros y litros de cerveza por encima. Sin duda, de los momentos mas graciosos del fin de semana.
En Inglaterra la cosa no era tan clara aunque el Chelsea se enfrenteba a un Wigan que no se jugaba nada. Finalmente acabó destrozando a su rival por 8-0 en un resultado que no muestra la diferencia real entre estos dos equipos ya que el Wigan acabo goleado por la indolencia con la que defendían las acometidas de los blues. En Manchester, los diablos rojos golearon también 4-0 al Stoke City en una amarga victoria ya que no les permitiría ganar la liga por 4º año consecutivo. El Chelsea recupera así un título que no ganaba desde 2006, y el próximo sábado disputará la final de la FA Cup en Wembley frente al valiente Portsmouth descendido de categoria por las deudas.
En Italia sin embargo habrá que esperar una semana mas para conocer al ganador del Scudetto. Las cosas se pusieron bien para el Inter que iba ganando 4-1 en casa al Chievo mientras que la Roma perdía en el Olímpico frente al Cagliari. Pero la relajación del Inter con el resultado les pudo costar caro ya que el Chievo consiguió acercarse en el marcador con dos goles, y la Roma, con mas corazón que fútbol, le dio la vuelta al marcador con 2 tantos de Francesco Totti (ángel y demonio ultimamente). También hay que decir que pese a los goles del Chievo, la victoria del Inter nunca pareció peligrar. Ahora queda solo una semana y el Inter debe ganar en Siena para asegurar el título. Un pinchazo del Inter unido a una victoria de la Roma en Verona daría el título a los giallorossi.
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